Predicaciones en audio por series

Serie:  El Evangelio de Marcos

Jesús bendice a los niños (Marcos 10:13-16)

Jesús bendice a los niños (Marcos 10:13-16)

El Señor dijo que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. En este estudio tendremos ocasión de meditar sobre cuáles son las cualidades que tienen los niños y que debemos imitar los adultos si queremos entrar en el reino de los cielos. También consideraremos la responsabilidad tan grande que los padres tenemos de llevar a nuestros hijos al Señor.
El joven rico (Marcos 10:17-22)

El joven rico (Marcos 10:17-22)

Un joven se acercó a Jesús con una petición. Aparentemente lo tenía todo: juventud, dinero, posición social, buen carácter y además era un hombre que se esforzaba por agradar a Dios. Sin embargo, le faltaba lo más importante; "la vida eterna". El Señor quería darle lo que le pedía, pero el joven no aceptó las condiciones. ¿Cuáles eran? ¿Por qué se echó atrás? ...
Jesús y las riquezas (Marcos 10:23-31)

Jesús y las riquezas (Marcos 10:23-31)

Jesús hizo una afirmación acerca de lo difícil que es para los ricos entrar en el reino de Dios. Esto dejó asombrados a los discípulos, que creían que la posesión de riquezas era una clara indicación del favor y la aprobación divinas. Muchos de estos principios equivocados son compartidos por la "teología de la prosperidad". Veamos lo que enseñó el Señor Jesucristo al respecto.
Jesús y la grandeza del servicio (Marcos 10:32-45)

Jesús y la grandeza del servicio (Marcos 10:32-45)

Las normas en el Reino de Dios han de ser totalmente diferentes a las del mundo. El Señor dijo: El que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero será siervo de todos. Y por supuesto, Cristo nos dio un claro ejemplo de este servicio cuando entregó su vida por nosotros en la Cruz.
El ciego Bartimeo recibe la vista (Marcos 10:46-52)

El ciego Bartimeo recibe la vista (Marcos 10:46-52)

El ciego Bartimeo es un ejemplo para nosotros de lo que significa "andar por fe y no por vista". Podemos aprender mucho considerando cómo su fe le llevó a vencer todos los obstáculos que le impedían llegar hasta Jesús...
La entrada triunfal en Jerusalén (Marcos 11:1-11)

La entrada triunfal en Jerusalén (Marcos 11:1-11)

El Señor Jesucristo fue aclamado como Rey por las multitudes en su entrada a Jerusalén. Al hacerlo cumplió la profecía que Zacarías había pronunciado siglos antes. Su intención era comprobar cuál era el estado espiritual de su pueblo y para ello se dirigió al templo, el centro de la vida espiritual de Israel. Lo que vio le desagradó profundamente, por lo que rápidamente salió de la ciudad...
Maldición de la higuera estéril (Marcos 11:12-14, 20-26)

Maldición de la higuera estéril (Marcos 11:12-14, 20-26)

La maldición de la higuera estéril sirve para ilustrar el juicio divino sobre Israel por su incredulidad. Ellos eran como una higuera frondosa con muchas hojas pero sin fruto. Aquí encontramos una seria advertencia para todos los cristianos, porque el Señor Jesucristo viene también a examinar nuestras vidas en busca de fruto.
Purificación del templo (Marcos 11:15-19)

Purificación del templo (Marcos 11:15-19)

El Señor Jesucristo entró en el templo en Jerusalén para inspeccionar lo que allí se hacía. Lo que vio fue que los sacerdotes estaban usando la religión para su propio beneficio. Por supuesto, él no dudó en condenar todo aquello...
La autoridad de Jesús (Marcos 11:27-33)

La autoridad de Jesús (Marcos 11:27-33)

Jesús había manifestado su autoridad mesiánica al entrar en Jerusalén y en el templo, pero los líderes religiosos del judaísmo no quisieron aceptarle. Así que le interrogaron sobre su autoridad. Este tema es fundamental para todos nosotros: ¿qué autoridad aceptamos en nuestras vidas? ¿Quién tiene la última palabra en lo que creemos?
Los labradores malvados (Marcos 12:1-12)

Los labradores malvados (Marcos 12:1-12)

El Señor Jesucristo contó esta parábola para explicar cómo el pueblo de Israel había sido infiel a Dios a lo largo de toda su historia y que como consecuencia iba a ser juzgado muy pronto. Su pecado consistió fundamentalmente en que recibieron las bendiciones de Dios pero se las quedaron para ellos sin dar gloria a Dios. Nosotros también debemos aprender de esta situación, porque el día en que tendremos que rendir cuentas de nuestras vidas se acerca.