Saltar al contenido

Estudio bíblico de Apocalipsis 6:1

Apocalipsis 6

Versículo 1

Continuamos hoy, amigo oyente, nuestro recorrido por el libro de Apocalipsis. Este es el último libro de la Biblia, la Palabra de Dios, y también el último, y el único libro profético del Nuevo Testamento.

Y hoy comenzaremos el capítulo 6. Este particular capítulo constituye una gran línea divisoria en el libro de Apocalipsis, que es de suma importancia.

Es probable que hoy, en este programa, nos acompañen amigos por primera vez a los que les cuesta entender el tema que aquí tratamos. También, y a modo de repaso para nuestros estimados oyentes habituales, vamos a dar un resumen a grandes rasgos.

Estamos estudiando un libro fascinante que habla de temas muy relevantes para el hombre moderno, para todos nosotros que vivimos en el siglo XXI. El autor de Apocalipsis fue el apóstol Juan, quien estuvo exiliado a causa de su fe en Jesucristo, en la Isla de Patmos. Allí recibió una visión maravillosa de parte de Dios. Este libro está dividido en tres secciones mayores, probablemente es el libro mejor organizado de toda la Biblia. En el capítulo 1, versículo 19, Jesucristo le ordena al apóstol Juan: Escribe las cosas que has visto, y las que son, y las que han de ser después de estas. Aquí tenemos la primera sección: "escribe las cosas que has visto", a Jesucristo glorificado, en el Cielo, quien se le presenta vestido con el ropaje del Gran Sumo Sacerdote; lleno de majestad, en pie, entre 7 candeleros, que representan a la Iglesia, con su luz encendida en la Tierra. La segunda sección de "las cosas que son", observamos a las siete iglesias escogidas a las que Jesucristo les envía un mensaje específico por medio de Juan. Por sus características particulares esas 7 iglesias representan la experiencia total de la historia de la Iglesia; cada una ilustra una de las 7 etapas por las que la Iglesia iba a transitar. La iglesia, como "Cuerpo" comenzó el día de Pentecostés; pero, un día será removida, retirada, de la Tierra, para encontrarse con Su Señor, Jesucristo, quien la introducirá en el Cielo. El capítulo 3 relata el final de la trayectoria terrenal de la Iglesia.

La tercera división tiene que ver con la última parte de la frase de Jesucristo "Escribe las cosas que has visto,.... y las que son,... y las que han de ser después de estas, que es la tercera. En un programa anterior mencionamos que se utilizó la palabra Meta-tauta dos veces al comenzar el capítulo 4, como queriendo enfatizar la secuencia histórica, el punto de vista histórico. Juan recalcó: después de estas ? Meta-tauta, para demostrar las cosas que tienen que suceder después. Así que a partir del capítulo 4 comienzan las cosas... las que han de ser después de estas. En los dos capítulos siguientes, los capítulos 4 y 5, Juan describe unas escenas que se desarrollaron en el Cielo. Juan escribe lo que vio: el Trono y al Señor Jesucristo, como el León de la tribu de Judá, sentado a la diestra de Dios, esperando a que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies.

En el capítulo 5, Jesucristo es descrito por Juan como el Cordero, porque así había venido a este mundo, en Su primera venida, como un "corderito indefenso, e inofensivo. Jesucristo es el Cordero, que expió los pecados de la Humanidad; y porque Él es el Redentor, el único entre todo ser viviente, sólo Él es capaz de tomar en sus manos - con las marcas de sus heridas- ese documento que representa el "título de propiedad" de esta Tierra. ¿Sabe usted, estimado amigo, amiga oyente, que Jesucristo es el Único con autoridad y poder, capaz de juzgar esta Tierra? Porque, según la Biblia, habrá un juicio severo, pero justo. Jesucristo es el que juzgará a este mundo no sólo por Quien es, -Dios encarnado-, sino por lo que Él ha hecho. Él ha creado esta Tierra, y esto le otorga el derecho sobre Su propiedad. En el capítulo 4 Jesucristo es adorado como el Creador. Pero, además, Él también es el Redentor de esta Tierra. En el capítulo 5, Él es adorado como el Redentor, como el Salvador; y porque Él es el Creador y el Redentor, Jesucristo es el único digno de juzgar esta Tierra. Él es el único capaz de gobernar la Tierra. Todas las naciones de este planeta tienen algún tipo de leyes, y jueces que aplican las condenas y castigos según esas leyes. Algunos sistemas judiciales son más justos que otros, y algunos jueces más imparciales y justos que otros. Lamentablemente, no hay ningún sistema perfecto, ni leyes perfectas, ni jueces perfectos. Todos son humanos, y pueden equivocarse en sus planteamientos y en sus juicios. Amigo oyente, ¿quién es digno de actuar como el juez perfecto y justo sobre la Tierra? Sólo el Señor Jesucristo, es digno; y este es el cuadro que Juan nos describe al concluir el capítulo 5.

Hemos llegado al capítulo 6 del libro de Apocalipsis. Nos encontramos en la tercera división principal de este libro. En el capítulo 4 encontramos que Juan fue llevado de manera misteriosa ?en el Espíritu- hasta el Cielo para relatar lo que allí veía y oía, para escribirlo y dárnoslo a conocer. ¿Por qué? Para que los que creemos en Jesucristo, los que Le hemos aceptado como nuestro único y suficiente Salvador, - hemos "nacido de nuevo" espiritualmente,- conozcamos de antemano el desarrollo del plan de Dios para la Humanidad, y para este planeta Tierra.

El apóstol Juan ya no menciona más a la "Iglesia", que es el nombre que se le ha dado aquí en la tierra al conjunto de personas redimidas y salvas por el sacrificio de Jesús en la cruz; ya no se menciona más a la "Iglesia" como tal, pero vimos que a partir del capítulo 4 de Apocalipsis, la Iglesia se encuentra representada por los 24 ancianos que rodean al Trono. La Iglesia se encuentra ahora en el Cielo, porque en la Tierra había ocurrido un acontecimiento asombroso. Prestemos atención a esta profecía que anuncia que un día ?no sabemos cuándo, ni el año, mes, día o la hora- Jesucristo llamará a cada hijo de Dios a reunirse con Él en las nubes, y en un instante, de forma sobrenatural, todos seremos quitados de este mundo. Se formará un gran caos, por esa ausencia instantánea de millones de personas, pero de esto hablaremos más adelante. El hecho es que la Iglesia ya está en el Cielo, con Jesucristo. Solamente al final del libro de Apocalipsis se menciona a la Iglesia en relación a una invitación.

Llegamos ahora al capítulo 6, y el escenario cambia. Ahora es la Tierra el tema que nos ocupará. Quizá nos preguntemos sobre qué está sucediendo en la Tierra, desde que salió y se marchó la Iglesia. Bueno, en la tierra ha comenzado el tiempo de "la Gran Tribulación". Este período ocupa los capítulos 6 al 18. En los capítulos 6 y 7, hasta el versículo uno del capítulo 8, veremos lo que ocurre cuando se abre "el libro sellado con siete sellos". Con la apertura de los siete sellos comienza en la Tierra "la Gran Tribulación". El personaje principal de todo el Apocalipsis, el Señor Jesucristo, es quien rompe los 7 sellos del documento de propiedad que tiene en sus manos. Al abrir los sellos, comienzan a galopar los 4 caballos. Veremos a los fieles, muertos por martirio durante ese período, y la llegada del "Día de la Ira". El séptimo sello provocará "el sonar de las siete trompetas"; lo veremos más adelante, entre los capítulos 8 y 11. "El sonar de las siete trompetas "que introduce a "a siete personas" sorprendentes, en los capítulos 12 y 13.

En los capítulos 15 y 16 veremos a una bestia que sube de la mar, y su presencia introduce "las siete copas de la ira". La última "copa de la ira" nos llevará a la profecía del "juicio de Babilonia". Los capítulos 17 y 18 describen el final del período de "la Gran Tribulación", y es entonces cuando Jesucristo vuelve a la Tierra. Esa será Su Segunda Venida a este planeta Tierra.

Es interesante observar que "Babilonia" es mencionada en el primer juicio a la Humanidad y en el último. Babilonia, está representada en la torre de Babel, porque es figura de la primera rebelión organizada contra Dios. Eso lo vimos cuando estudiamos el libro del Génesis, capítulo 11; y ahora nos encontramos que se menciona a Babilonia como símbolo representativo de la última rebelión contra Dios; ambas fueron rebeliones religiosas, como lo leeremos en el capítulo 17 de Apocalipsis, pero en el último evento, también es una rebelión política, que veremos en el capítulo 18.

Lo importante en todo el desarrollo de esta profecía es mantener nuestro enfoque sobre el personaje principal de Apocalipsis, Aquel, que es el único digno de abrir ese documento, ese libro. Él dirige todo, y está en control de todos los eventos. Esto nos indica que este libro es una revelación; aquí se revela y se descubre a Jesucristo. Juan ya no Le ve caminando entre los 7 candeleros, porque éstos, que simbolizan a la Iglesia, ya han sido removidos de la Tierra. Jesucristo ya no es el Sumo Sacerdote, presentándose como el fiel Intercesor, sino que ahora, al abrir los sellos del libro, es Él quien ejecuta la Voluntad de Dios sobre la Tierra, Todos los juicios de la Gran Tribulación se suceden al abrir los sellos del libro, las trompetas, las personas, y las copas de ira.

La Gran Tribulación será iniciada desde el cielo. Jesucristo, personalmente va a dirigir toda la operación. El salmista, autor del Salmo 2, versículo 9, también tuvo esta revelación, cuando escribió: Los quebrantarás con vara de hierro.

Seguramente muchos de nuestros oyentes opinarán que esa medida de castigos y juicios no son de su agrado, porque muchos asumen que Dios es Amor, que ama, perdona, y olvida. Eso es correcto, pero también Dios es JUSTO. Con paciencia Jesucristo trata de atraer la atención del ser humano, para salvarlo y para darle el regalo de la Vida Eterna. Su Amor cubre "multitud de pecados", pero, tristemente la mayoría de las personas no quieren saber nada de Jesucristo, y hablar de Dios no es un tema muy popular. Y así como el ser humano desea ser auto-suficiente, no quiere una intervención, ni una injerencia en su vida, así tampoco ningún gobierno, ni partido político alguno aceptaría a Jesucristo como la Autoridad Suprema. No aceptarían a Jesucristo como la Autoridad máxima, como el Juez justo. Pero, estimado amigo oyente, debemos reiterar que Él es el Único que es digno. ¿Y cómo llegará Jesucristo al poder sobre todas las naciones? Exactamente como nos lo expresa este segundo Salmo que hemos leído. Los quebrantarás con vara de hierro; eso lo veremos más adelante, cuando estudiemos el juicio sobre la Tierra.

Ahora, la Iglesia será librada de este período. ¿Por qué? ¿Porque son personas muy buenas? No, amigo oyente. Ellos eran pecadores, pero fueron salvos por la Gracia de Dios. Sólo aquellos que han rechazado la Gracia de Dios pasarán por el período de la Gran Tribulación. Esa es la razón por la cual creemos que Dios utiliza programas de radio, como éste, para esparcir la Palabra de Dios a todos los confines de la tierra. Él va a permitir que todos puedan escuchar el Evangelio, y dará oportunidad a todas las personan para que tomen una decisión; dependerá de esa decisión si se les será franqueada la entrada en el Cielo, o si deberán pasar por la Gran Tribulación.

Los capítulos 4, en donde vimos el escenario del Trono y al Trino Dios, y el capítulo 5, donde Juan nos describe el libro, ese importante documento en manos del Señor Jesucristo, estos dos capítulos constituyen la preparación para lo que sigue a continuación ? el juicio en la Tierra. Destacaremos ciertos factores que aumentan la intensidad y ferocidad de la Gran Tribulación. Mencionaremos 5 de ellas.

1.- El Espíritu Santo ya no frenará la maldad. Eso no quiere decir que el

Espíritu de Dios dejará la Tierra. El Espíritu Santo estuvo en el mundo antes del día de Pentecostés, el día en que asumió un nuevo ministerio, el de bautizar a los creyentes en el Cuerpo de Cristo, de llenarlos y morar en ellos, guiándoles fielmente en este mundo. Él removerá y trasladará a la Iglesia de la Tierra, pero eso no quiere decir que Él también se ausentará. El Espíritu Santo permanecerá en el mundo, pero ya no restringirá el mal.

2.- La verdadera Iglesia, como luz y sal, ya se habrá marchado de la Tierra. La Iglesia no tiene mucho peso en el mundo, pero cuando se marche de este mundo, ya no habrá ni siquiera esa reducida influencia.

3.- El diablo sabe que sólo dispone de un tiempo muy breve, por lo que tratará de aprovechar esta situación; y Dios le dará la libertad para ello.

4.- Personas llenas de maldad gozarán de libertad para llevar a cabo sus nefastos planes. Es decir, que el Anticristo podrá tomar control de esta Tierra, por un breve período.

5.- Habrá un juicio directo de parte de Dios. Eso lo vemos en este capítulo 6 y en el versículo 17, donde dice: Porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?

No creemos que la Gran Tribulación surgirá de repente, como un gran tornado. La apertura de los 7 sellos del documento se hará de forma ordenada y organizada, gradual, y cronológica; Jesucristo romperá uno sello a la vez.

Al llegar a este capítulo queremos hacer una afirmación cuidadosa, y es que, desde el capítulo 4 en adelante, este libro nos presenta el futuro. Todo lo que estamos viendo revelado es parte del futuro, de cosas que no han ocurrido todavía. Todavía nos encontramos en el período de la historia que pertenece al de las cosas que son, el tiempo de la iglesia, que todavía está presente en la Tierra.

Cuando estudiamos a las siete iglesias y los mensajes que cada una recibió de parte de Jesucristo, pudimos ubicar y relacionar a cada una de ellas en un correspondiente tiempo en la historia universal. Pero, todo lo que veremos a partir de ahora, no es posible encuadrarlo en ella. La diferencia entre los dos principales sistemas de interpretación de las profecías de Apocalipsis, desde el punto de vista futurista, o el histórico, se manifiesta en este punto. Como resultado, existen cerca de 50 sistemas diferentes de interpretación, según el profesor de Biblia y teólogo Dr. Walvoord, que han salido de la perspectiva histórica.

El apóstol Juan afirmó en este punto de su visión que hemos llegado a los acontecimientos "futuros", y todo lo que él vio y oyó, a partir de ahora hasta el capítulo 20, ocurrirá "en un futuro". Aquí veremos el desarrollo cronológico, que por otra parte, es muy lógico. Estos eventos no están ocurriendo en la actualidad, y tampoco podemos afirmar que ya ocurrieron, que ya son "historia".

Comenzamos una sección que titularemos "La apertura del primer sello y el jinete del caballo blanco". El Señor Jesucristo ha tomado en Sus manos el libro, el documento que tiene 7 sellos, y rompe el primer sello. Leamos el versículo 1 de este capítulo 6 de Apocalipsis:

1 Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. (Ap. 6:1)

El apóstol Juan, trasladado al Cielo para ser el testigo "de las cosas que han de venir" recibe la orden: Ven y mira. El versículo 2, continúa:

2 Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer. (Ap. 6:2)

Jesucristo va a abrir todos los sellos en el orden correcto. El Señor está en control de todos los acontecimientos, de cada movimiento, de cada palabra que se pronuncia, y toda criatura en el Cielo está actuando según Su mandamiento. Al romper el sello del documento, el apóstol Juan recibió la orden de mirar y ver; y obedientemente, Juan escribe lo que vio y oyó. Juan vio un caballo blanco, con un jinete sobre su lomo.

Ahora, el simbolismo del jinete en el caballo blanco ha dado ocasión para muchas opiniones diferentes. Una interpretación entre varios estudiosos es que este jinete representa a Cristo, y se apoyan en el Salmo 45, y en el capítulo 19 de Apocalipsis. Pero la mayoría de los expositores bíblicos contemporáneos de la tendencia pre-milenarista interpretan que el caballo blanco y su jinete representan al Anticristo. Esa es la posición teológica que han tomado los doctores Scott, Ironside, Chafer, Walvoord, Woodbridge, y Pentecost. Y esa es también nuestra posición, e interpretación de esta primera figura, el primer jinete.

Ahora, el Anticristo no va a surgir como un malvado villano. Después de todo, estimado amigo oyente, los ángeles de Satanás son ángeles de luz. No se parecen a los demonios, así como se los caricaturiza. No tienen cuernos, rabo, o cualquier otra característica que pueda resultar repelente. Ocurrirá que el Anticristo se dará a conocer como un hombre extraordinariamente atractivo, carismático, que fascinará a todas las naciones. Muchas situaciones y conflictos adversos preparan el escenario apropiado para que surja un personaje que prometerá paz, bienestar, equidad y justicia para todos. Lenta, pero inexorablemente, las naciones buscarán a un líder que tendrá el respaldo y el consenso mundial. Este personaje será aclamado como el supuesto "salvador del mundo", y se le ofrecerán todos los poderes necesarios para gobernar a nuestro planeta. Se esperará que él logre la anhelada paz para un mundo inestable.

En nuestro próximo programa hablaremos más sobre ese personaje Y vamos a saber más detalles que Dios nos ha revelado por medio del apóstol Juan, el autor de Apocalipsis. En el siguiente programa también comentaremos el significado de los demás jinetes que comienzan a galopar a medida que Jesucristo abra los restantes sellos.

Le sugerimos, estimado oyente, que lea todo el capítulo 6 de Apocalipsis, para estar más informado de los próximos temas a tratar. ¡Qué Dios bendiga Su Palabra, y le bendiga usted, al escucharla! Hasta nuestro próximo encuentro.

Copyright © 2001-2024 ( TTB - Thru the Bible, RTM - Radio Transmundial, EEA - Evangelismo en Acción). Todos los derechos reservados.

CONDICIONES DE USO