Jeremías 8
Reina Valera 1995
1"En aquel tiempo, dice Jehová, sacarán de sus sepulcros los huesos de los reyes de Judá, los huesos de sus príncipes, los huesos de los sacerdotes, los huesos de los profetas y los huesos de los habitantes de Jerusalén.
2Los esparcirán al sol y a la luna y a todo el ejército del cielo, a los cuales amaron y sirvieron, en pos de los cuales anduvieron, a los cuales consultaron y ante los cuales se postraron. No serán recogidos ni enterrados; serán como estiércol sobre la faz de la tierra.
3Y escogerá la muerte antes que la vida todo el resto que quede de esta mala generación, en todos los lugares adonde arroje yo a los que queden, dice Jehová de los ejércitos.
4"Les dirás asimismo que así ha dicho Jehová: "El que cae, ¿no se levanta? El que se desvía, ¿no vuelve al camino?
5¿Por qué es este pueblo de Jerusalénrebelde con rebeldía sin fin? Abrazaron el engañoy no han querido volverse.
6Escuché con atención: no hablan rectamente, no hay hombre que se arrepientade su mal, diciendo: "¿Qué he hecho?" Cada cual se volvió a su propia carrera, como caballo que se lanzacon ímpetu a la batalla.
7Aun la cig@ueña en el cielo conoce su tiempo, y la tórtola, la grulla y la golondrina guardan el tiempo de su venida; pero mi pueblo no conoce el juicio de Jehová.
8"¿Cómo decís: "Nosotros somos sabios, y la ley de Jehová está con nosotros"? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas.
9Los sabios se avergonzaron, se espantaron y fueron consternados; aborrecieron la palabra de Jehová; ¿dónde, pues, está su sabiduría?
10Por tanto, daré a otros sus mujeres, y sus campos a quienes los conquisten; porque desde el más pequeñohasta el más grande, cada uno sigue la avaricia; desde el profeta hasta el sacerdote todos practican el engaño.
11Y curan la herida de la hijade mi pueblo con liviandad, diciendo: "Paz, paz", ¡y no hay paz!
12¿Se han avergonzadode haber hecho abominación? Ciertamente no se han avergonzadoen lo más mínimo, ¡ni saben lo que es la verg@uenza! Caerán, por tanto, entre los que caigan; cuando los castigue caerán, dice Jehová".
13"Los eliminaré del todo, dice Jehová. No quedarán uvas en la vid ni higos en la higuera, y se caerá la hoja, y lo que les he dado pasará de ellos".
14¿Por qué permanecemos sentados? ¡Reuníos! ¡Entremos en las ciudadesfortificadas y perezcamos allí! Porque Jehová, nuestro Dios,nos ha destinado a perecer, y nos ha dado a beberaguas envenenadas, porque hemos pecado contra Jehová.
15Esperamos paz, y no hubo nada bueno; día de curación, y hubo turbación.
16Desde Dan se oyó el resoplarde sus caballos; al sonido de los relinchos de sus corcelestembló toda la tierra. Vinieron y devoraron la tierray todo lo que en ella había, la ciudad y a los que moraban en ella.
17"Yo envío sobre vosotros serpientes, víboras contra las cualesno hay encantamiento, y os morderán, dice Jehová".
19Se oye la voz del clamorde la hija de mi pueblo, que viene de la tierra lejana: "¿No está Jehová en Sión? ¿No está en ella su Rey?" "¿Por qué me hicieron airarcon sus imágenes de talla, con vanidades ajenas?"
20¡Pasó la siega, se acabó el verano, pero nosotros no hemos sido salvos!
21¡Quebrantado estoypor el quebrantamientode la hija de mi pueblo; abrumado estoy, el espantose ha apoderado de mí!
22¿No hay bálsamo en Galaad? ¿No hay allí médico? ¿Por qué, pues, no hubo sanidadpara la hija de mi pueblo?
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2Los esparcirán al sol y a la luna y a todo el ejército del cielo, a los cuales amaron y sirvieron, en pos de los cuales anduvieron, a los cuales consultaron y ante los cuales se postraron. No serán recogidos ni enterrados; serán como estiércol sobre la faz de la tierra.
3Y escogerá la muerte antes que la vida todo el resto que quede de esta mala generación, en todos los lugares adonde arroje yo a los que queden, dice Jehová de los ejércitos.
4"Les dirás asimismo que así ha dicho Jehová: "El que cae, ¿no se levanta? El que se desvía, ¿no vuelve al camino?
5¿Por qué es este pueblo de Jerusalénrebelde con rebeldía sin fin? Abrazaron el engañoy no han querido volverse.
6Escuché con atención: no hablan rectamente, no hay hombre que se arrepientade su mal, diciendo: "¿Qué he hecho?" Cada cual se volvió a su propia carrera, como caballo que se lanzacon ímpetu a la batalla.
7Aun la cig@ueña en el cielo conoce su tiempo, y la tórtola, la grulla y la golondrina guardan el tiempo de su venida; pero mi pueblo no conoce el juicio de Jehová.
8"¿Cómo decís: "Nosotros somos sabios, y la ley de Jehová está con nosotros"? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas.
9Los sabios se avergonzaron, se espantaron y fueron consternados; aborrecieron la palabra de Jehová; ¿dónde, pues, está su sabiduría?
10Por tanto, daré a otros sus mujeres, y sus campos a quienes los conquisten; porque desde el más pequeñohasta el más grande, cada uno sigue la avaricia; desde el profeta hasta el sacerdote todos practican el engaño.
11Y curan la herida de la hijade mi pueblo con liviandad, diciendo: "Paz, paz", ¡y no hay paz!
12¿Se han avergonzadode haber hecho abominación? Ciertamente no se han avergonzadoen lo más mínimo, ¡ni saben lo que es la verg@uenza! Caerán, por tanto, entre los que caigan; cuando los castigue caerán, dice Jehová".
13"Los eliminaré del todo, dice Jehová. No quedarán uvas en la vid ni higos en la higuera, y se caerá la hoja, y lo que les he dado pasará de ellos".
14¿Por qué permanecemos sentados? ¡Reuníos! ¡Entremos en las ciudadesfortificadas y perezcamos allí! Porque Jehová, nuestro Dios,nos ha destinado a perecer, y nos ha dado a beberaguas envenenadas, porque hemos pecado contra Jehová.
15Esperamos paz, y no hubo nada bueno; día de curación, y hubo turbación.
16Desde Dan se oyó el resoplarde sus caballos; al sonido de los relinchos de sus corcelestembló toda la tierra. Vinieron y devoraron la tierray todo lo que en ella había, la ciudad y a los que moraban en ella.
17"Yo envío sobre vosotros serpientes, víboras contra las cualesno hay encantamiento, y os morderán, dice Jehová".
Lamento sobre Judá y Jerusalén
18A causa de mi intenso dolor, mi corazón desfallece.19Se oye la voz del clamorde la hija de mi pueblo, que viene de la tierra lejana: "¿No está Jehová en Sión? ¿No está en ella su Rey?" "¿Por qué me hicieron airarcon sus imágenes de talla, con vanidades ajenas?"
20¡Pasó la siega, se acabó el verano, pero nosotros no hemos sido salvos!
21¡Quebrantado estoypor el quebrantamientode la hija de mi pueblo; abrumado estoy, el espantose ha apoderado de mí!
22¿No hay bálsamo en Galaad? ¿No hay allí médico? ¿Por qué, pues, no hubo sanidadpara la hija de mi pueblo?
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